martes, 16 de noviembre de 2010

American staffordshire terrier, el luchador con alma de niño

El American Staffordshire Terrier o Amstaff, es una raza poco conocida,(yo no la conocía bien hasta que llegó hasta mis manos Kaos), muchas veces confundida con el pitbull. Criticada y castigada por el desconocimiento de todos aquellos que hablan sin documentarse a priori.

Es difícil conocer con certeza los orígenes ciertos de esta maravillosa raza. Los orígenes del American Staffordshire Terrier, comienzan en Inglaterra a finales del siglo XVIII.

Remontándonos alrededor del año 400 a.C. una línea de molosos muy vigorosos llegó a las costas británicas. Este perro era el Alano español, los carniceros y granjeros ingleses transformaron el Alano en el primer y verdadero bulldog, (entonces llamado bulldoge). El bulldoge inglés de trabajo fue el primer perro en tener el llamado cierre tetánico, que en realidad tiene más que ver con la bravura que con cualquier anomalía estructural en los maxilares. Estos bulldoge tenían la habilidad de perseguir, capturar y quedar colgados de los ollares, el pómulo o la garganta de un gran herbívoro y no dejarlo marchar, sin importar lo fieramente que luchara el animal o a cuanto castigo se viera sometido el perro. estos bulldoge solían encontrarse en las granjas y carnicerías, a veces participaban en competiciones organizadas.


















El bulldoge era capaz de someter a animales de gran tamaño como los toros y los osos, (un bulldoge de 36 Kg experimentado era capaz de derribar a un toro de 800 Kg). Ante el enorme dolor que les provocaba la mordedura, sin que el perro recibiera daño alguno. Cuando estaba dispuesto a someterse el toro bajaba la cabeza hasta el suelo y permitía que el bulldoge tirara de él, hacia atrás, para arrastrarle a la carnicería, donde el toro era sacrificado.

La idea de este deporte tan cruel como era el apresamiento del toro (Bullbaiting), era que la carne sería más tierna antes de sacrificarlo, gracias a los ataques de estos perros. Aunque esta idea no tenía base alguna, y realmente el verdadero propósito era el de llenar el bolsillo de las personas que adiestraban a estos perros, para que participasen en éstas sádicas y sangrientas peleas. Muchos perros eran aplastados por las pezuñas, destripados por las astas  y lanzados al aire, lo que resultaba en patas, columnas vertebrales y cráneos rotos cuando daban contra el suelo. En general, tanto los perros como los toros sufrían enormemente, aun así todos disfrutaban con estos espectáculos.






Cuando los concursos de apresamiento de animales pasaron a ser ilegales en Gran Bretaña, las únicas pruebas de este tipo que sobrevivieron fueron las peleas de perros.

Una vez que estas peleas contra toros quedaron prohibidas, los criadores que apreciaban la fiereza, valentía y tenacidad de los bulldoge volcaron su atención en la cría de perros para utilizarlos como animales de pelea. los mineros del carbón de Staffordshire cruzaron al bulldoge con Terrier de manto liso y con frecuencia de color negro o canela y continuaron con la tradición de los combates mediante peleas clandestinas que todavía se celebran en la actualidad. A partir de estos cruces entre el bulldoge y los terrier surgieron el Bull y Terrier y el Staffordshire Terrier.


Bull y Terrier




Staffordshire Terrier


 Estos animales cruzados eran criados para que fueran agresivos con otros perros, por su enorme valentía y su gran resistencia al dolor, una excelente capacidad para la coagulación de la sangre ( que era de ayuda cuando resultaban heridos), la voluntad de luchar hasta el fin y un afecto incomparable hacia las personas.

El hombre explotó estos atributos al máximo animando a estos perros a luchar entre sí en los rings hasta el final. El resultado de estos combates dependía del reto establecido. A veces las peleas duraban hasta que un perro era sacado o huía del ring y otras veces no acababa hasta que uno de los dos perros moría. En cualquier caso este es un ejemplo del brutal abuso por parte del hombre del don del perro como compañero leal, al permitir que estos animales sufrieran heridas e incluso la muerte para así ganarse el elogio de sus amos.
Un hecho muy interesante a descatar es que los antiguos criadores consideraban esencial que estos perros tuvieran auténtica devoción hacia las personas. Si un perro se revolvía hacia una persona o mostraba agresividad hacia ella, éste era sacrificado inmediatamente, lo cual condujo a que estos perros tuvieran un enorme personalidad amistosas hacia las personas e hizo que la raza no fuera un peligro declarado para el hombre.
Estos perros llegaron a los recién nacidos Estados Unidos como perros polivalentes para las granjas y como guardianes de las fronteras. Los deportes de lucha en los que participaban perros eran también muy populares. De igual forma que sucede hoy en muchos ámbitos, los norteamericanos de la época ya daban muestras de gustar de adaptar cualquier deporte o espectáculo a sus propios gustos.
Así el antiguo Staffie inglés se iría seleccionando y cruzando para obtener un perro de mayor talla, mucha más fuerza y más llamativo, capaz de enfrentarse a animales más grandes o de luchas contra sus iguales de manera más fiera. los propietarios de  perros de pelea obtenían buenos ingresos en el circuito profesional y podía vender también los cachorros hijos de sus perros por sumas consideradas en la época. Con este criterio selectivo se fue creando el American Staffordshire Terrier, pero también otras razas como el bulldog Americano o Pit bull Terrier, raza con un tronco común con el Amstaff, pero que se terminaría separando cuando se prohibieron las peleas de perros a principios del siglo XX, y unos criadores decidieron seguir criando un perro exclusivamente de trabajo, el Pit bull, en tanto que otros optaron por centrarse en criterios más bien morfológicos y adaptar al temperamento de sus perros una nueva vida en sociedad.

American Bulldog



Pit Bull Terrier

American Staffordshire Terrier


El Amstaff, diminutivo con el que se le conoce en todo el mundo, es un perro muy inteligente, dotado de una extraordinaria autoconfianza, feliz, estable y muy efusivo. Con las personas es cariñoso y muy afectivo, pudiendo vivir como un perfecto perro de familia, muy apegado a los suyos. Se le puede tener en familias con  niños sin ningún problema ya que su relación con estos es fantástica. Igualmente a muchos sorprende el verlo haciendo de perro de terapia acompañando a ancianos o enfermos de distinta índole, pero es que su entrega a las personas y su forma de comportarse con los más débiles, con extremo cuidado, le alejan mucho de los estereotipos que existen sobre esta raza. Se trata de un animal muy obediente cuyo máximo propósito es servir a su guía, a la persona de referencia con la que entable una relación y unos lazos inquebrantables.






miércoles, 10 de noviembre de 2010

La llegada a casa de Kaos

Os voy a empezar contando como llegó a casa mi primer american staffordshire terrier, Kaos.

tras sufrir la muerte de mi anterior perra Hanna, una pastor belga, de manto negro, que hacía 14 años que adopté, y viendo el vació que te deja una compañera tan fiel, decidí animado por mi novia, adoptar a otro perrito :). Al poco tiempo de comenzar mi búsqueda por la red, encontré un American staffordshire terrier, en un anuncio que decía se regalan.

Me decidí a llamar, concertando una cita con el dueño, para verlos a todos y elegir a uno de ellos, claro está sin el conocimiento de mis padres jajajaja tan solo con la colaboración de mis dos complices, mi novia y mi hermana. Llegó el primer sábado de marzo de 2010, me levanté impaciente porque era el día en el que iba a conocer a Kaos, asique hice todos los preparativos y me dispuse a ir en su busca.

Al llegar allí, la primera que salió a recibirnos fue su madre, una impresionante American staffordshire terrier, de color dorado muy claro, detrás de ella, los cinco cachorritos jejeje, yo los miraba, los volvía a mirar, pero no sabía cual elegir, si por mi hubiera sido, :) me los hubiera llevado todos para mi casa. Pero no podía ser, asique me decanté por el más simpático, de todos ellos, me lo llevé muy contento, aunque un poco triste al ver  su madre llorar.

Todo iba muy bien, Kaos entre mis brazos, el cual solo hacía mover el rabo, hasta que me despedí del dueño y  subí al coche, madre mía pobret, no paraba de llorar.

Tocaba la llegada a casa, ahí ya me puse un poco nervioso jajaja porque sabía la reacción que iba a tener mi madre. Total que cuando me disponía a abrir la puerta, justo salía  mi padre, el cual me encontró intentando introducir la llave jajaja tenías que ver su cara, era todo un poema, pero bueno lo recibió muy bien, pronto se convirtió en mi aliado jajajaja. Asique se lo dejé en sus brazos a la entrada de mi casa, disponiéndome a entrar para preparar el terreno, jajaja mi hermana cuando me vio ya me miraba con cara de circunstancia. Pues bien, entré, saludé, y mi madre aun no se había dado cuenta de lo que yo tenía entre las piernas jajaja cual fue su sorpresa cuando lo vio aparecer jajajaja madre mía me dio una tarde que me quería morir, ya que ella era de la idea de no traer ningún perro más a casa. No fue así, me toco aguantar una tarde de reprimendas, pero Kaos se quedó con nosotros, tardando muy poco en  acostumbrarse a la vida en la ciudad, olvidándose de la vida en el campo, como vais a poder observar en las fotos jejeje.







Hasta aquí esta entrada donde os he contado como Kaos, llegó a mi casa, espero que os haya gustado,y que no haya sido muy largo :) poco a poco os iré contando como ha ido evolucionando mi Amstaff. un saludo para todos mis seguidores.

American staffordshire terrier, el estandar

 







Aspecto General

El American staffordshire terrier debería darnos la impresión de ser un perro con una gran fuerza para su tamaño, equilibrado y musculoso, aunque ágil y elegante, y muy vital con respecto a su entorno. debería ser bajo pero fuerte y no tener las extremidades largas.

Cabeza

De longitud media, profunda, con un cráneo amplio, con unos músculos de los pómulos muy pronunciados, stop bien definido y con las orejas implantadas altas.

Orejas: cortadas o no, siendo éstas últimas preferidas.

  
Orejas medio levantada

 Las orejas no cortadas deberían ser cortas y portadas levantadas o medio tiesas. las orejas totalmente caídas deben ser penalizadas.




Orejas cortadas


Orejas tiesas sin cortar.
  

Ojos: oscuros y redondos, bajos con respecto al cráneo y bastante separados entre sí,los párpados no serán rosados.


  
  
Hocico: De longitud media, con la parte superior redondeada. cae bruscamente por debajo de los ojos. los maxilares están bien definidos. la mandíbula debe ser fuerte y tener un cierre muy potente. Labios unidos, homogéneos y no serán péndulos. los incisivos superiores quedan justo por delante y están en estrecho contacto con los inferiores. la trufa será completamente negra. Con la boca cerrada, nos da la impresión de ser un hocico pequeño con relación al cráneo, y nunca debe aparentar ser largo, aunque esto es solamente un efecto visual.



La cabeza del American stafforsshire terrier es una cabeza mesocéfala, a pesar de que el eje biauricular correspondería a una cabeza braquicéfala. El amstaff combina sabiamente lasa proporciones de las medidas longitudinales, con las más pronunciadas transversales. al primer golpe de vista la cabeza causa sensación de tamaño, aunque siempre debería guardar armonía con las demás partes del cuerpo y no resaltar sobre el conjunto, tiene más o menos la misma longitud que anchura.



cuello: grueso, ligeramente arqueado, estrechándose desde los hombros a su unión con la cabeza. de longitud media ausencia de papada.

Hombros: fuertes, musculosos, con unas escápulas amplias y oblicuos

Dorso: bastante corto, cae ligeramente desde la cruz hasta la grupa y tiene un descenso suave y corto desde la grupa hasta el nacimiento de la cola. Riñón ligeramente subido.

Cuerpo: Costillas bien abovedadas y profundas en la parte posterior. todas ellas están bastante juntas entre sí. Las anteriores bastante separadas para permitir el desarrollo del pecho. Éste será profundo y amplio.

Cola: corta de implantación baja y se va estrechando hasta acabar en una punta fina. No está curvada ni es portada por encima del dorso.







Extremidades: las delanteras deberían ser rectas, con los huesos alargados o redondeados y con los metacarpos verticales. no habrá asomo de flexión en las extremidades anteriores. Las posteriores serán musculosas, con los corvejones bien aplomados, y no se inclinan ni hacia dentro ni hacia fuera. Pies de tamaño moderado, bien arqueados y compactos. La marcha debe ser elástica y sin balanceos.




Capa: Corta, pegada al cuerpo, áspera al tacto y lustrosa.

Color: se admite cualquier color, ya sea de un solo color, particolor o con manchas, pero no son apreciados los totalmente blancos, los que tienen mas de un 80 % de color blanco. La cría de los negros y fuego (marrón) no debería ser estimulada.

Talla: Altura y peso deberían estar proporcionados. La altura a la cruz sería de 46 a 48 cm para los machos y de 43 a 46 cm para las hembras.


Defectos o faltas: toda diferencia en relación a la descripción que precede debe ser considerada como una falta que será penalizado en función de su gravedad: trufa "nevada", ojos de color claro o rosado, cola demasiado larga o mal portada y el prognatismo superior o inferior.