Os voy a empezar contando como llegó a casa mi primer american staffordshire terrier, Kaos.
tras sufrir la muerte de mi anterior perra Hanna, una pastor belga, de manto negro, que hacía 14 años que adopté, y viendo el vació que te deja una compañera tan fiel, decidí animado por mi novia, adoptar a otro perrito :). Al poco tiempo de comenzar mi búsqueda por la red, encontré un American staffordshire terrier, en un anuncio que decía se regalan.
Me decidí a llamar, concertando una cita con el dueño, para verlos a todos y elegir a uno de ellos, claro está sin el conocimiento de mis padres jajajaja tan solo con la colaboración de mis dos complices, mi novia y mi hermana. Llegó el primer sábado de marzo de 2010, me levanté impaciente porque era el día en el que iba a conocer a Kaos, asique hice todos los preparativos y me dispuse a ir en su busca.
Al llegar allí, la primera que salió a recibirnos fue su madre, una impresionante American staffordshire terrier, de color dorado muy claro, detrás de ella, los cinco cachorritos jejeje, yo los miraba, los volvía a mirar, pero no sabía cual elegir, si por mi hubiera sido, :) me los hubiera llevado todos para mi casa. Pero no podía ser, asique me decanté por el más simpático, de todos ellos, me lo llevé muy contento, aunque un poco triste al ver su madre llorar.
Todo iba muy bien, Kaos entre mis brazos, el cual solo hacía mover el rabo, hasta que me despedí del dueño y subí al coche, madre mía pobret, no paraba de llorar.
Tocaba la llegada a casa, ahí ya me puse un poco nervioso jajaja porque sabía la reacción que iba a tener mi madre. Total que cuando me disponía a abrir la puerta, justo salía mi padre, el cual me encontró intentando introducir la llave jajaja tenías que ver su cara, era todo un poema, pero bueno lo recibió muy bien, pronto se convirtió en mi aliado jajajaja. Asique se lo dejé en sus brazos a la entrada de mi casa, disponiéndome a entrar para preparar el terreno, jajaja mi hermana cuando me vio ya me miraba con cara de circunstancia. Pues bien, entré, saludé, y mi madre aun no se había dado cuenta de lo que yo tenía entre las piernas jajaja cual fue su sorpresa cuando lo vio aparecer jajajaja madre mía me dio una tarde que me quería morir, ya que ella era de la idea de no traer ningún perro más a casa. No fue así, me toco aguantar una tarde de reprimendas, pero Kaos se quedó con nosotros, tardando muy poco en acostumbrarse a la vida en la ciudad, olvidándose de la vida en el campo, como vais a poder observar en las fotos jejeje.
Hasta aquí esta entrada donde os he contado como Kaos, llegó a mi casa, espero que os haya gustado,y que no haya sido muy largo :) poco a poco os iré contando como ha ido evolucionando mi Amstaff. un saludo para todos mis seguidores.
Hanna será siempre Hanna .
ResponderEliminarElegiste el perrito precioso, siempre tienes muy buen gusto :)
Era tan pequeñinnnnnn aissssss ^^ , el tiempo pasa muy rapido :( .